Una de cada dos mujeres conoce los síntomas típicos de una cistitis: escozor al orinar, dolor en la zona abdominal justo encima de la vejiga y un constante deseo de orinar.
La cistitis o infección de orina es una infección de las vías urinarias bajas o de la vejiga. Durante una cistitis se produce la inflamación de la mucosa (urocistitis) o de toda la pared de la vejiga (pancistitis). Dependiendo de la evolución, los facultativos diferencian entre la cistitis aguda (primoinfección o infección aislada), recurrente y la crónica.
La vejiga forma junto con la uretra, el uréter y los riñones el denominado tracto urinario: la uretra y la vejiga forman las vías urinarias inferiores, y el uréter y los riñones las vías urinarias superiores. Por esta razón, la infección de orina, más conocida como cistitis, es una infección de orina inferior, lo mismo que la uretritis.
La mayoría de las veces la cistitis está causada por bacterias. En especial la bacteria Escherichia coli, que normalmente está presente en el colon, se introduce en las vías urinarias llegando a la vejiga y provocando así una infección. También los virus, hongos y parásitos pueden ser los causantes de la infección.